Decomiso

  Delitos, Derecho Penal

El decomiso es una acción que realizan los cuerpos de seguridad del estado para incautar una mercancía. Esta mercancía es utilizada con fines ilícitos o para el tráfico ilegal y ayuda a investigar sobre el delito cometido. 

Esta acción se realiza con el objetivo de facilitar la investigación criminal y  salvaguardar el bien jurídico protegido. También tiene como objetivo evitar que se  continúe cometiendo la actividad delictiva.

¿Qué es decomiso?

El decomiso es una acción que consiste en confiscar  los medios a través de los cuales se ha cometido el delito. Estos pueden ser productos y sustancias obtenidos y comercializadas de forma ilegal.

La regulación del decomiso se encuentra en los artículos 127, 128 y otros del Código Penal español, pertenecientes al  Título relacionado con las consecuencias accesorias. Existen también algunos artículos en la Ley de Enjuiciamiento Criminal (LECRIM), que se refiere al decomiso.

¿Buscas abogado especialista en Derecho Penal?

Te ayudamos a encontrar abogado especialista en Penal.
Contamos con una amplia red de abogados colaboradores en toda España.

El decomiso puede funcionar como consecuencia accesoria a una condena o de forma autónoma, puede ser utilizado como medida cautelar. 

La finalidad de la medida cautelar es evitar que se continúe cometiendo el delito o que continúe ocasionando efectos.

Tipos de decomiso

Los diferentes tipos de decomisos son regulados por el ordenamiento jurídico español de acuerdo con sus objetivos, extensión y  en función de sus efectos. Los principales tipos de decomiso son los siguientes:

Decomiso directo

El decomiso directo es el que se aplica a los delitos dolosos, el cual está tipificado el artículo 127.1 del Código Penal. Consiste en que la autoridad judicial debe incautar los medios, instrumentos, bienes y ganancias indirectas y directas.

Esta acción también se realiza de acuerdo con el artículo 127.2 del Código Penal para el caso de delitos imprudentes. A los cuales se les haya impuesto como castigo la privación de libertad por un tiempo mayor a un año. 

Para estos casos el decomiso la autoridad judicial no está en la obligación de proceder al decomiso, queda a su voluntad.

Decomiso ampliado

El artículo 127 del Código Penal permite que se realice el decomiso de bienes y efectos que su origen no pueda probarse. Pero es necesario cumplir con algunas condiciones, entre ellas: 

Que el individuo  haya sido condenado por haber cometido alguno de los delitos establecidos en el artículo 127 bis.

El delito debe haberse cometido de manera continuada y deben existir indicios de que parte del patrimonio del penado proviene de la actividad delictiva continuada. 

Este tipo de decomiso sólo se aplicará cuando haya sospecha de que el beneficio obtenido es mayor a los 6.000 euros.

Decomiso equivalente o por sustitución 

El artículo 127.3 del Código Penal permite hacer una sustitución en los bienes a decomisar, en los casos sean insuficientes o inalcanzables. Esto significa que en los casos que la autoridad no pueda encontrar los bienes para  decomisar o hayan sido destruidos, podrá ordenar el decomiso de otros bienes. 

Estos bienes sustitutos deben tener el valor correspondiente a bienes que se deberían incautar. Esta forma de decomiso funciona como si fuera un embargo.

Decomiso de terceros

El artículo 127 del Código Penal permite el decomiso de ganancias transferidas a terceros, de  efectos y de bienes. Pero sólo en las siguientes situaciones:

Cuando se supiera o sospechará que los efectos y ganancias provienen de actividades delictivas.

En los casos que sospechará o  supiera que con la transferencia de los efectos y ganancias se dificulta la incautación.

El decomiso de terceros permite que se ejecute el decomiso por sustitución. Esto origina que si un tercero recibe efectos, bienes y ganancias que  proceden de actividades ilegales y después los enajena u oculta. La autoridad judicial puede tomar otros bienes hasta lograr obtener el valor de los primeros bienes.

Consecuencias del decomiso

La principal consecuencia que trae el decomiso es la privación de la propiedad sobre los objetos que deben ser confiscados. El decomiso es una condena penal o una medida que se aplica a elementos que han sido utilizados para cometer el delito o han sido obtenidos a través del delito.

La única forma de evitar un decomiso es acreditar la legalidad de los bienes o elementos a incautar. Los bienes instrumentos, medios y ganancias incautados por las autoridades serán llevados a un depósito hasta que el juez decida que se hará con ellos.

La decisión puede ser una utilización provisional, adjudicación al Estado o establecer el precio de los mismos para realizar pago de indemnizaciones a las víctimas.